Elaboración meticulosa y extracción en frío
Cuidamos minuciosamente todos los pasos del proceso de elaboración de nuestro Aceite de Oliva Virgen Extra, lo que garantiza la excelencia de nuestro producto. Desde la recolección de las aceitunas hasta el embotellado final, cada etapa se lleva a cabo con la máxima dedicación y respeto por la tradición.
Nuestras aceitunas, cultivadas en condiciones óptimas de altitud y clima en la Sierra de Segura, son cuidadosamente seleccionadas y recolectadas a mediados de octubre, momento preciso de su madurez. La extracción en frío es la piedra angular de nuestro proceso, asegurando que el aceite conserve todas sus propiedades organolépticas y beneficios para la salud. Controlamos rigurosamente la temperatura durante esta fase para preservar los delicados matices de sabor y aroma, resultando en un AOVE verdaderamente premium.
Cumplimos con las normativas y estándares sanitarios más estrictos en cada etapa de la elaboración y embotellado. Nuestras instalaciones están diseñadas para mantener la máxima higiene, garantizando la pureza del aceite desde la extracción hasta el envase. La trazabilidad y el control de calidad son elementos clave, asegurando que cada botella que sale de nuestra bodega cumpla con los más altos estándares.
El almacenamiento de nuestro AOVE se realiza en condiciones óptimas, lejos de la luz y en ambientes controlados de temperatura. Este proceso asegura que el aceite mantenga su frescura y calidad a lo largo del tiempo, preservando su tonalidad verde característica y sus propiedades organolépticas excepcionales.
Cada botella de nuestro Aceite de Oliva Virgen Extra es el resultado de un compromiso inquebrantable con la calidad y la autenticidad. Estamos orgullos de elaborar un AOVE que no solo es un deleite para el paladar, sino también un testimonio de la dedicación y el cuidado meticuloso que dedicamos a cada fase de su elaboración.